La pasiflora se cuenta entre los mejores remedios naturales para luchar contra un problema muy común en las sociedades modernas, el insomnio. A continuación cuatro remedios caseros para tratamientos de los trastornos nerviosos más comunes.
Infusión simple contra el insomnio. Con veinte gramos de flores y hojas de pasiflora por cada litro de agua, infundir durante un minuto y filtrar. Tomar tres tazas al día, una al mediodía, la segunda una hora antes de acostarse y la tercera durante la noche si el sueño no acaba de llegar.
Fórmula contra el estrés. A partes iguales, pasionaria, melisa, hipérico, espino blanco y anís estrellado en una proporción de diez gramos por planta y combinando el contenido de una cucharada sopera rasa de la mezcla por cada taza de té o agua. Se hierve minuto y medio, lo dejamos reposar diez más y colamos.
Se aconseja ingerir a pequeños sorbos, dos o tres tazas diarias. En situaciones de estrés agudo se pueden hervir unas cuatro cucharadas de mezcla por cada litro de agua de manera que resulte más diluido e ir bebiendo a lo largo de la jornada.
Fórmula contra la ansiedad. Infusión válida contra las taquicardias y los espasmos gastrointestinales de origen nervioso. En cantidades de veinte gramos de pasiflora, valeriana, espino albar, manzanilla y tolo, una cucharada sopera rasa por cada taza de agua. Hervir cinco minutos, dejar diez más en infusión y colar. Añadir unas gotas de zumo de limón o bien un poco de miel para compensar el mal sabor de la valeriana. Tomar tres tazas al día preferiblemente alejadas de las comidas.
Tisana para el dolor de espaldas. Ocho gramos de pasiflora, valeriana y viburno por medio litro de agua. Hervir tres minutos, mantener diez más en reposo, filtrar y edulcorar con un poco de miel. Tomar un par de vasos antes de acostarse para evitar molestias durante la noche.
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